jueves, 14 de septiembre de 2017

Desafío Urbión


Mucho tiempo sin escribir, no por ello he dejado de ser un incansable soñador, buscando en todo momento el camino para llegar a la cima y llenarme de experiencias que hacen de mi vida un sendero de felicidad. Hace unos días disfrute de unas de las carreras por montaña más bonitas de mi vida, quizás por ser una prueba del pueblo y para el pueblo de Covaleda y su entorno. Impresionantes paisajes los que rodea esta prueba ascendiendo a varios picos y entre ellos el pico Urbión, todo por sendas de grandes pinos, hayedos y vegetaciones que hacían de esta, una prueba única. También sus 2.500 metros positivos en 36 km eran apasionantes encontrando a cada paso una laguna o uno VOLUNTARIO, sí, increíble pero cierto, cada 500 metros la organización tenia a una persona, nunca había visto una cosa igual. La gente te animaba en todo momento, autobuses que subían al monte para que tu familia pudiera ir a animarte… Sorprendentemente solo tenia unos 222 inscritos, creo que hay tantas carreras que se nos pasa pruebas de este nivel por alto. No quiero dejar pasar por alto su balizaje, no las conté pero era tan bonito no ver el bosque plagado de tiras de plástico y ver pequeñas banderas amarillas que s camuflaban entre el paisaje pero que en ningún momento te haciendo dudar que ibas por el buen camino. Me quedo con dos imagines que a nivel emocional quedaron en mi retina, una fue en el momento de ascensión desde la laguna negra al pico Urbión cuando estaba haciendo el paso por la cuerda giré la cabeza y mi una imagen espectacular con la laguna y sus paredes de roca que la protegían. El otro momento fue la cima de este pico con una niebla espesa, atizando el aire y dejándonos en momentos pequeños claros para divisar el horizonte… Que más os puedo contar,… Enhorabuena a la organización del Desafío Urbión por hacer una prueba de MONTAÑA, con calidad y hacer al corredor disfrutar en todo momento…. Pero bueno, se me ha olvidado contaros mi crónica, jajajaj, no pasa nada, no fue de mis grandes carreras precisamente, el estómago falló desde el principio, pero seguimos aprendiendo y disfrutando de cada experiencia. Mi Maribel, como siempre, más feliz que una perdiz, esta mujer no sufre, jejejej...