viernes, 9 de enero de 2015

Proyecto Solidario "Pintando Cimas" Esas personas que creía yo que necesitaban tanto y que realmente tenían lo más importante, que era la capacidad de saber vivir intensamente con lo que tenían... Gracias Esperanza por estar siempre cerca de mi.


Carlillos............se me ha quedado tanto que decir, que te escribo para expresar un poquito de tantos sentimientos que aparecen cuando comienza un proyecto como el tuyo. Y no escribo para quedar mejor, sino porque creo que se lo debo a muchas personas gracias a las que veo la vida de forma muy similar a como la ves tu. Se lo debo a nuestros padres, a Manoli y Rosi, a Chamorro y Rafa Torres, que nos han enseñado a creer en nosotros mismos y nos han dado las herramientas y los valores para conseguirlo. Se lo debo a nuestros hermanos, Jose y Grego, que han sido nuestros compañeros en todos nuestros sueños. Se lo debo a personas como Miguel De La Cuadra Salcedo y a mis compañeros cooperantes en el Sáhara que siembran las semillas de la cooperación, a mis compañeros de trabajo, a mis amigos, a mis pacientes que son capaces de sonreir cuando los atiendo a pesar de estar enfermos, ... y a personas como tú, que confiáis tanto en mí y sois capaces de movilizar a los demás para ir creando un mundo mejor y enseñarnos que en la vida el éxito está en las cosas sencillas y en acompañarnos unos a otros en el camino.

Cada vez que me propones algún proyecto, vienes a mí con ese brillo en los ojos y esa sonrisa de entusiasmo que te he comentado que fue lo que me sorprendió de los niños a los que yo creía tener que ayudar y que al final fueron ellos los que me ayudaron a mí. Me enseñaron otra forma de ver la vida, a disfrutarla, a sentirla, a compartirla, a soñarla.....Esas personas que creía yo que necesitaban tanto y que realmente tenían lo más importante, que era la capacidad de saber vivir intensamente con lo que tenían.
Proyectos como el tuyo consiguen que paremos esta vida tan rápida que llevamos y nos planteemos lo verdaderamente importante de nuestra existencia. 
Yo quiero que mis niñas crezcan rodeadas de personas como tú, con la fuerza de creer en proyectos para mejorar el mundo, con la confianza de saber que con esfuerzo, las cosas se pueden conseguir, que sepan levantarse cuando uno tropieza, que disfruten de cada momento, que sepan sentir la mano en la que te puedes apoyar y a la vez, sepan ofrecerla sin esperar nada a cambio.
Quiero enseñarles que la vida así es como merece la pena y por eso quiero que todos los niños, y también los mayores, tengan las mismas oportunidades. Se lo debemos a ellos, que nos enseñan a aprovechar la esencia de la vida. Se lo debemos a ese brillo en esos ojos tan abiertos y felices, y en esas sonrisas que pintan el mundo de esperanza y entusiasmo.
Pintemos cimas y caminos, pintemos la vida, demos gracias porque existan personas como tú que siguen teniendo sueños.
Tu amiga
Esperanza